Potenciar el sentido del olfato para aprovechar las propiedades químicas que en forma de aceites se extraen de las plantas y entran en el torrente sanguíneo, es uno de los principios básicos sobre los que se asienta la aromaterapia. Una práctica milenaria indicada para mejorar y regular la respuesta a nuestro sistema emocional pero que, también tiene un importante impacto en el plano físico.
El uso tradicional de la lavanda ingerida en infusión como relajante es muy conocido. Sin embargo, quizás, no sean muchas las personas que conozcan que el aceite de esta planta puede ser un potente digestivo por sus propiedades antiespasmódicas o un efectivo cicatrizante para las heridas.
Ahondar precisamente en este tipo de aceites, aceites esenciales que se caracterizan por su potente fragancia, es el objetivo propuesto por la experta en psiconeuroinmunología Natalia Pardo en una iniciativa “muy completa para dar respuesta a muchas temáticas que nos demandan”.
De la salud de la piel a la menopausia
De esta manera, se trabajará sobre algunos aceites esenciales que servirá para aliviar, momentos de estrés, cansancio y depresión, en la primera jornada que tendrá lugar el 17 de julio. Al día siguiente, se abordará el cuidado de la piel y todo lo que se precisa. El lunes 24 de julio, la formación se dirigirá al antes, durante y post de la menopausia “que muchas mujeres en lugar de disfrutarla, la sufren ya que en ocasiones lleva aparejada toda una sintomatología que no son capaces de gestionar, y, también el dolor”.
Por último, el 25 de julio, se darán las indicaciones necesarias para combatir el dolor neuropático, articular y muscular.
En la parte teórica, apoyada por apuntes que ofrecerá a los asistentes, se ahondará en la regulación del sistema nervioso, la psiconeuroinmunología “en función del mal funcionamiento de los distintos sistemas…endocrino, digestivo, emocional..” y, por último, en las propias propiedades de los aceites esenciales “y ver cómo pueden apoyar a los dos anteriores”.
En la parte práctica, se hará hincapié, “sobre todo, en el uso y manejo de este tipo de aceites pero también prácticas para liberar la parte emocional y somática del cuerpo”, indica.
Se trata de una oportunidad única para, de forma concentrada y amena, sumergirse en el mundo de los aceites esenciales y conseguir beneficios desde el primer minuto.