Este lunes se hacía pública la sentencia que condena al edil portuense José Juan Herrera Martel, en primera instancia, por acoso sexual contra la extrabajadora del ayuntamiento Yaiza Sotorrío con una pena de 4 meses de prisión, inhabilitación para el ejercicio del sufragio pasivo durante este tiempo y el pago de una indemnización de 3.000 euros a la querellante.
Una sentencia - que Yaiza quizás recurra para lograr que incluya también la jerarquía existente entre ambos- pero de la que se siente “orgullosa” porque evidencia su capacidad de defenderse de todos los obstáculos, a pesar del miedo.
En una entrevista concedida a La Voz de Fuerteventura, Yaiza reconoce los malos momentos por los que pasó, los conflictos internos vividos a sabiendas de que muchas personas iban a sufrir pero convencida de que era el paso que debía dar para poner su grano de arena en la lucha contra esta “lacra social”. No tenía que demostrar nada, recalca, “solo quería que me respetaran”.
Confiesa haberse sentido muy sola y abandonada por las instituciones, colectivos y personas a las que ”pudo el miedo”. Un miedo que, asegura, ha aprendido a entender a pesar de que “de la noche a la mañana te conviertes para la gente cercana en un problema…..y, eso, duele”.
Numerosas han sido las decepciones, como la de la edil de Igualdad, Lilian Concepción, de la que esperaba otra respuesta, colectivos feministas o compañer@s de la corporación que “no han hecho nada”.
Denuncia también la “humillación” que ha sufrido, asegura, por parte del alcalde, Juan Jiménez, y de la concejala Peña Armas en distintas declaraciones públicas; incluido el testimonio en el juicio de Peña sobre “con cosas que no son verdad”, y contra las que no se va a “quedar parada”.
En esta línea, califica como “una burla” el comunicado emitido por la corporación local, tras conocerse la sentencia, en el que la institución informa del cese de las competencias al edil. Un comunicado en el que no se pide perdón ni disculpas.
Asimismo, critica que a lo largo de dos años, desde que se presentó la querella penal en el Juzgado hasta la publicación de la sentencia, ha habido muchos fallos en el sistema que no protege a la víctima. Se han cometido diferentes delitos, aseveró, a pesar de que hay leyes que protegen pero “nadie hace nada…¿no hay asociaciones, abogados, jueces, nadie ve nada, o es que la propia víctima tiene que seguir denunciando?”, lamentó.
Yaiza Sotorrío habla abiertamente de cómo la ha afectado la exposición pública de su vida privada con la publicación de los mensajes de contenido sexual en los medios de comunicación. Asegura que su intención “nunca fue ridiculizar ni humillar a nadie” pero los mensajes son la prueba y fundamentan la base de su denuncia, explicó.
Sotorrío también niega de forma rotunda que la interposición de la querella haya obedecido a cuestiones políticas y asegura que su intención no fue nunca provocar una moción de censura y un cambio en el gobierno. Entre otras cuestiones, porque no tenía potestad y “una sentencia puede tardar cinco años en fallarse…qué sentido tendría”.
En el contexto actual, a sabiendas de que si Herrera entrega su acta de concejal ella será su sustituta y puede cambiar el equilibrio de fuerzas que sostienen en el gobierno a Juan Jiménez, Yaiza asegura: “no sé qué haría” aunque tiene bien claro que “no apoyaría a este equipo de gobierno”.
Para finalizar, Yaiza Sotorrío, transmite un mensaje a Herrera al que invita a pedir ayuda.
