Como cada tercer sábado del mes de septiembre, Fuerteventura se rinde a su patrona, la Virgen de La Peña, reina y soberana. Miles de peregrinos recorren desde días atrás los senderos para venerar a la patrona de los majoreros y majoreras.
Las motivaciones son variadas, desde agradecimientos de superación de la enfermedad, a promesas por cumplir y muchos estudiantes, también pidiendo un buen curso escolar.
La Vega de Río Palmas acoge a todos ellos, engalanada, preciosa, consciente de albergar el palpitar de los corazones que se acercan a la pequeña estatuilla de alabastro, la virgen sedente con el niño que despierta la emoción de creyentes y no creyentes.
Fuera de su santuario, la virgen despliega su manto de poder para unir a un pueblo que año tras año recorre caminos y senderos, desde Cofete, desde Cotillo, desde Antigua, siempre la dirección puesta hacia La Vega para poder llegar a ella.
Anoche, a las doce, la misa a los peregrinos marcaba el inicio del día grande de los festejos, el Día de La Virgen, seguida por los fuegos artificiales iluminando el cielo de Betancuria y dando paso a una animada verbena.
Preludio de la solemne eucaristía concelebrada por el obispo de la Diócesis de Canarias a las 12.00 horas, de este sábado.
Tras el éxito de la anterior edición, se ofrecerá a las 14.00 horas degustación de puchero majorero tradicional y concierto a cargo de la banda Los Lolas. Posteriormente, se celebrará el Encuentro de Mayores de Fuerteventura y seguirán las actuaciones musicales a las 21.00 con Olga Cerpa y Mestisay, seguido de N-Clave.
Por último, mañana domingo, a las 11.00 horas se desarrollará un taller de Juegos y Deportes Tradicionales de Canarias “No olvides lo nuestro” y a las 12.00 del mediodía, en la plaza de la iglesia, se llevará a cabo la tradicional lucha canaria en honor a la Virgen de la Peña.
La festividad en torno a la Virgen de La Peña es una ocasión singular que une la devoción religiosa, la música tradicional y las costumbres culturales en un evento que fortalece el sentido de comunidad en la isla. Fuerteventura es hoy un solo pueblo.
¡Viva la Virgen de La Peña!