El viceconsejero de Empleo del Gobierno de Canarias hace balance de los datos de la EPA del último trimestre de 2020, que reflejan también un crecimiento trimestral de la ocupación, y apela a continuar “confiando en las medidas de contención y de apoyo”
El viceconsejero de Empleo, Gustavo Santana, hizo balance este jueves de los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) en Canarias, de los que se extrae un aumento de la ocupación del 0,99% respecto al trimestre anterior (8.100 personas más, hasta las 827.400), pero también un incremento trimestral del 1,9% del número de personas paradas, que sitúa la tasa de paro en el 25,22%, con 279.000 personas desempleadas, pero que el viceconsejero recordó que está todavía “muy lejos de los picos que se registraron en la anterior crisis”. Asimismo, la EPA refleja unas variaciones interanuales que muestran un crecimiento del número de personas paradas del 28,3%, con 61.600 parados más que en el último trimestre de 2019, y una caída del número de personas ocupadas del 12% y 112.800 personas menos.
Como señaló Santana, la tasa de paro que registra Canarias en un contexto de paralización económica y cero turístico “está lejos de los datos del paro del cuarto trimestre de 2013, en los que la EPA marcó una tasa de paro del 33,09%, en plena fase de expansión económica de Canarias”. En cuanto a la comparativa interanual con 2019, el viceconsejero recordó que “nos comparamos con un trimestre en el que Canarias cerraba el año con una tasa de paro del 18,78%, la más baja desde el tercer trimestre de 2008, y se colocaba a la cabeza de las comunidades autónomas en las que más descendía el paro”.
Ahora, detalló, “la situación ha cambiado y el impacto diferencial de la pandemia en Canarias deja ver sus consecuencias en la economía y el empleo”. En este sentido, manifestó que, en cualquier caso, los datos de la EPA del cuarto trimestre de 2020 “no son positivos”, pero subrayó la dificultad de realizar comparativas interanuales y trimestrales en un contexto, el de la pandemia de la COVID-19, “poco predecible”. Por este motivo, apeló a “seguir confiando en las medidas de contención y de apoyo, especialmente en los próximos meses, para proteger a nuestro tejido productivo y a nuestros trabajadores y trabajadoras”.
A su juicio, en los próximos meses “es previsible que no se vea una mejora inmediata, sino que estimamos que esta empezará a notarse a partir del segundo semestre de 2021”. “Seguiremos trabajando para contener en la mayor medida posible el impacto de la crisis sanitaria en la economía y el empleo”, concluyó.
