El Cabildo de Fuerteventura y el Organismo Autónomo de Museos, Centros (OAMC) del Cabildo de Tenerife y Universidad de La Laguna han desarrollado una nueva campaña en el yacimiento arqueológico Lobos I, ubicado en el Islote de Lobos. Con esta excavación, los trabajos se han ampliado hacia el sur del yacimiento, hallándose nuevos concheros. Además, se ha realizado, por primera vez, una exploración con georradar que determina tres zonas de potencial interés arqueológico no descubiertas hasta ahora.
La presidenta del Cabildo, Lola García, visitó los trabajos, acompañada por el alcalde de La Oliva, Isaí Blanco, el consejero de Patrimonio Histórico, Rayco León, el concejal de Cultura y Patrimonio Histórico, David Hernández, y el director del Museo Arqueológico de Fuerteventura, Luis Mata. Como directores de la excavación han actuado el conservador del Museo Arqueológico de Fuerteventura, Isidoro Hernández, así como Carmina del Arco de la Universidad de La Laguna y Mercedes del Arco Aguilar conservadora de Museos de Tenerife.
Los primeros sondeos en el yacimiento Lobos I se realizaron en 2012, a los que le siguieron sucesivas campañas en 2013, 2014, 2015, 2016, 2022 y la actual de 2023. El yacimiento se ubica en la Playa de la Calera o de la Concha, al suroeste del Islote de Lobos, siendo la investigación arqueológica de mayor relevancia de toda Canarias, ya que determinaría la presencia de los romanos en el Archipiélago.
Los resultados obtenidos en las sucesivas campañas han mostrado la presencia de un taller de producción de púrpura de época romana, fechado entre el siglo I a.C y el I d.C. Los hallazgos han podido situar al Islote de Lobos como límite meridiano de los intereses económicos romanos, con la púrpura como uno de los productos más preciados, considerados un símbolo de lujo y poder. La presencia estacional del Imperio romano fue confirmada, además, con el descubrimiento de un segundo yacimiento (Lobos II).
Carmina del Arco ha explicado que “para nosotros como arqueólogos, este taller de púrpura es un hallazgo muy valioso, ya que es único en la zona conocida como círculo del Estrecho hacia el océano atlántico”. “En esta campaña, hemos seguido trabajando en la zona sur del yacimiento, descubriendo la cotidianidad de aquellos que trabajaban en la producción de púrpura y sus espacios de elaboración. Hemos encontrado nuevos concheros y sedimentos impregnados de tinte, que generan interés en la comunidad internacional”.
La arqueóloga añadió que “una de las novedades de esta campaña son las prospecciones con georradar que han definido tres nuevas áreas potencialmente fértiles en las zonas norte y sur del yacimiento, lo que significa que la excavación que hoy tenemos, de aproximadamente 520 metros cuadrados, podría extenderse en próximas campañas por la superficie de la playa de La Calera y otras zonas del islote”.
La presidenta insular, Lola García, puso en valor “el que es el proyecto arqueológico más trascendente de toda Canarias, ya que vendría a confirmar la presencia de asentamientos romanos en el Archipiélago, lo que cambiaría completamente nuestra historia”. García añadió que “nos encontramos, por lo tanto, en una zona de gran riqueza arqueológica, que posiblemente sea más amplia de lo que creíamos inicialmente y, por eso, debemos seguir potenciando las investigaciones de cara a profundizar y continuar divulgando todos estos conocimientos”.
Por su parte, el consejero insular, Rayco León, reforzó la idea de que “aún queda mucho por trabajar en este yacimiento, no solamente en futuras excavaciones, sino también con los estudios que se produzcan a partir del material que aquí se encuentra. El potencial que tiene es enorme a la hora de desarrollar un espacio museístico que pueda dar a conocer nuestra historia y, por supuesto, formará parte de nuestras campañas de difusión del patrimonio”.
En las sucesivas excavaciones realizadas hasta ahora, se han localizado materiales de manufactura romana, tanto cerámicas realizadas a torno como piezas metálicas de bronce, hierro, plomo y líticas, relacionadas con la labor del proceso de púrpura. También se registran objetos relacionados con la actividad doméstica, como cerámica de cocina y vajilla de mesa, así como espacios de combustión que muestran el consumo de cabras, ovejas, cerdo, peces moluscos y productos vegetales. En esta última campaña se han detectado indicios, además, de vajilla elaborada con cerámica de barniz negro, que era utilizada por las clases pudientes del imperio romano.
Los trabajos se desarrollan por parte del Museo Arqueológico de Fuerteventura y Museos de Tenerife, con la participación de científicos de la Universidad de la Laguna, la Dirección General de Patrimonio Cultural y Binter Canarias.