Agentes de la Policía Local de La Oliva y la Guardia Civil de Corralejo desalojaban un pub y levantaban numerosas actas de denuncia en base al régimen sancionador, por incumplimiento de las medidas de prevención y contención frente a la Covid-19.
En el nivel 2 que se encuentra la isla de Fuerteventura, el local no debía superar el aforo de 25 personas, encontrándose en su interior más de 50 individuos según pudieron verificar ambos cuerpos policiales.
Durante el desalojo se detenía a un hombre que escupió a la cara de manera sorpresiva a un guardia civil y que incluso llegó a intentar golpearlo con su propia cabeza.
Esta persona había salido del local sin hacer uso de la correspondiente mascarilla, realizando un gesto obsceno a la fuerza actuante y portando una botella de cristal.
El detenido, que mostró resistencia activa, tuvo que ser reducido entre cuatro efectivos policiales, llegando a provocar lesiones a uno de ellos y daños en el uniforme. En el traslado del presunto autor de los hechos a dependencias policiales, este profirió golpes con sus piernas al vehículo oficial, llegando a desplazar y descolgar el cristal de una puerta.