Pocas personas secundaron este sábado, en Fuerteventura, la concentración convocada por la Coordinadora Anti-privatización de la Sanidad Publica (CAS) y celebrada en unas sesenta ciudades españolas para reivindicar una sanidad pública digna y políticas dirigidas a favorecer el sistema público frente al privado.
A pesar de ello, las asociaciones Salud y Sonrisas, Justicia por la Sanidad y Asamblea Popular de Fuerteventura, organizadoras de la reivindicación en la isla, sí destacaron la nutrida representación de colectivos que trabajan en este ámbito en la Isla y que, un día más, exigieron la derogación de los artículos 67 y 90 de la Ley General de Sanidad que permite derivar pacientes a la privada; y la Ley 15/97 dirigida a que un centro público pase a ser gestionado por empresas privadas por décadas.
En esta línea, desde la plataforma Asamblea Popular de Fuerteventura, Rafael Marrero abogó por una visión más holística del sistema y menos asistencialista.
Cesión de suelo en Pájara para centros privados
En cuanto a las reivindicaciones más concretas para Fuerteventura, se exigió el refuerzo de la atención primaria y el impulso a las infraestructuras sanitarias en el sur de la Isla. En este punto, tanto Marrero como el presidente de Salud y Sonrisas, Eduardo Blasco, criticaron la cesión de suelo realizado en Pájara por su alcalde, Pedro Armas, para destinarlo a centros privados de salud.
Con respecto a la gestión del Centro de Mayores de Casillas del Ángel, ambos criticaron que está “abandonado” y mostraron su temor por que la nueva Residencia que se está construyendo en Puerto del Rosario, con una inversión de 10 millones de euros, se gestione de la misma manera, de forma privada.