El Parque Rural de Betancuria, un área protegida de incalculable valor natural en Fuerteventura, fue escenario este fin de semana de una polémica fiesta ilegal. El evento, conocido como "Palm Beach", fue organizado en una villa privada dentro del parque. Contó con asistentes que abonaron 30 euros por acudir, algunos trasladados en guaguas desde diferentes puntos de la Isla. Sin embargo, la actividad no contaba con los permisos legales necesarios como ha confirmado el alcalde del municipio, Enrique Cerdeña, en declaraciones a La Voz de Fuerteventura, en Radio Insular. ,
Así lo aseguró el regido que recalcó que el vento se desarrolló sin la autorización requerida: “Esto es ilegal. En el Parque Rural de Betancuria no se puede realizar ningún tipo de evento sin los permisos correspondientes, y estos suelen ser extremadamente restrictivos debido a la necesidad de proteger la fauna y el territorio”, subrayó.
Cerdeña explicó que el Ayuntamiento tuvo conocimiento de la fiesta, a través de la publicación de la información en la web de Radio Insular y en sus redes, y aunque la villa donde se celebró el evento es una propiedad privada, aclaró que eso no exime de cumplir con la normativa. “Cualquier evento, incluso en propiedades privadas, debe cumplir con los permisos legales para garantizar la seguridad y respetar el entorno protegido”.
Policía Local y Guardia Civil investigan los hechos
El alcalde indicó que el caso ya ha sido puesto en conocimiento de la Policía Local y la Guardia Civil, quienes han iniciado investigaciones para determinar las responsabilidades. “Estamos trabajando para que estas cosas no vuelvan a suceder y para que se respeten las normas, especialmente en un entorno tan delicado como este”, señaló Cerdeña
Hasta el momento, no se ha presentado ninguna denuncia formal, pero el Ayuntamiento está recopilando información para aclarar las circunstancias de la fiesta y tomar medidas legales si fuera necesario. “No sabemos si el propietario de la villa fue quien organizó el evento o si fue una persona externa. Este tipo de actividades clandestinas son inaceptables y representan un riesgo tanto para el medioambiente como para la seguridad de las personas”, afirmó el alcalde.
Protección del Parque Rural
El Parque Rural de Betancuria, declarado espacio protegido, está sujeto a estrictas regulaciones que buscan preservar su valor ecológico y cultural. Cerdeña reiteró el compromiso de su administración con la conservación y aseguró que cualquier actividad futura en el parque deberá contar con todas las autorizaciones necesarias: “El Ayuntamiento seguirá trabajando para proteger nuestro patrimonio y evitar que estas situaciones se repitan”, concluyó.