Complicado delimitar el impacto
La consejera de Empleo y Turismo de Fuerteventura, Jéssica de León, ha trasladado desde Fuerteventura un mensaje de tranquilidad al sector turístico de las Islas y ha insistido en que la caída de FTI, aún siendo el tercer mayor turoperador para Canarias, representa apenas el 3% del volumen de llegada de viajeros al archipiélago.
Es un mazazo para la industria turística, “pero ya había señales”, reconoció, haciendo especial hincapié en que el impacto, todavía sin cuantificar no será semejante al producido tras la caída de Thomas Cook.
El Ejecutivo analiza las consecuencias y cómo afectará la quiebra a los 24 establecimientos ligados a FTI en Canarias. De ellos 12, están en Fuerteventura. Siete se encuentran en propiedad o en explotación a través de Meeting Point y Labranda; y los otros 5 vinculados al megaproyecto Stella Canaris, que una vez más, quedará en suspenso.
En total, a falta de cuantificar de forma más certera, se estima que pueda haber unos 1.500 trabajadores directos afectados en el archipiélago.
Desde la Consejería se han pautado ya encuentros con las patronales hoteleras canarias, cabildos y la propia Secretaría de Estado, del Gobierno central, para analizar la situación de quiebra y marcar las estrategias a seguir. La consejera reconoció las dificultades para definir el impacto “ya que FTI no solo tiene hoteles en propiedad, o en explotación, sino que opera con distintas cadenas hoteleras”. Es imposible de cuantificar, “no tenemos datos certeros por lo que no queremos desvelarlos para evitar causar alarma social”, manifestó.
Los empresarios no pagarán el IGIC de las facturas no abonadas
De León trasladó el compromiso del grupo FTI de repatriar a los clientes que se encuentran en Canarias y que contrataron su viaje a través de un paquete turístico. Para el resto, será más complicado gestionar su regreso “por lo que mantenemos contacto con AENA y con la Embajada alemana para ayudarles a salir”. Son turistas que desde hoy deben hacer frente a los gastos de estancia y de vuelos. Gastos que podrán reclamar con posterioridad a un Fondo alemán, según explicó FTI.
Por otro lado, los viajes programados para Canarias desde este martes han quedado suspendidos.
Cuestionada sobre el impacto que pueda suponer la quiebra para los empleados, la titular de Empleo y Turismo aseguró que está a la espera de ver qué hará FTI con los hoteles que tiene en propiedad y con los empleados. El grupo podría solicitar un ERTE o ERE para los trabajadores afectados, también en otras comunidades.
Ayer mismo se reunió el primer Comité de Dirección de Turismo y Empleo de Canarias “para empezar a vigilar, a tomar medidas y cuantificar un presupuesto en caso de que estos ERES o ERTES se produzcan; que no nos pille a mitad del camino”, subrayó.
No descarta impulsar distintas líneas de ayuda, como ocurrió en el caso de Thomas Cook, cuando SCE activó ayudas para los trabajadores, “ayudas durante cuatro meses de 500 euros; estamos estudiando distintas fórmulas en el caso de que esto llegara a pasar en Canarias”.
La consejera también avanzó que los hoteleros afectados por los impagos de FTI no deberán abonar el IGIC correspondiente a las facturas sin cobrar. Una medida reciente cuyo reglamento se publicó el pasado 27 de marzo y que evitará que los empresarios tengan que pagar los impuestos por servicios no abonados como sí ocurrió en el caso de Thomas Cook, generando gran malestar en el sector.