“Cuando me di cuenta de que no podría ir a los Juegos Olímpicos, se me rompió el corazón”. Son palabras de la rider majorera Julia Castro en una entrevista en el programa La Voz de Fuerteventura. Explica los motivos por los que no podrá competir a pesar de surcar las aguas majoreras y de medio mundo sembrando multitud de títulos en kitepark y en wake.
Confiaba en su cuerpo y en la buena temporada para poder dar lo mejor de sí en esta importante competición que es, sin duda, el sueño de todo gran deportista, y aprovechar que por primera vez los Juegos Olímpicos estrenan el fórmula kite.
Pero a medida que se acercaba la fecha y fue haciendo cuentas, Julia se percató de que no sería posible reunir los cerca de 30.000 euros que se precisan para entrenar en esta disciplina de cara a las olimpiadas. Una cantidad que se duplica en el caso de entrenar con entrenador ya que serían 60.000 euros anuales por campaña olímpica (4 años).
Cuando poco quedaba por hacer, más allá de lamentar, Julia recibió una llamada que le devolvió la ilusión y esa sonrisa que caracteriza su rostro. La rider participará en los Juegos Olímpicos, no como competidora, sino como comunicadora en redes sociales de todo lo que rodea a la Federación Internacional de Vela.
Acudirá hasta Marsella, una de las sedes de los Juegos, a implementar esa estrategia en diversas plataformas y medios que, con el equipo, lleva desarrollando desde hace varios meses.
Julia estará detrás de toda la comunicación que la Federación de Vela transmita al mundo entero a través de Facebook, Twitter y Youtube. Un reto “increíble” que asume esta, también amante de la vela, “para que todo el mundo se entere de los resultados y de lo que pasa por el agua”. Se trata de un objetivo complicado, señala, “porque todo está capado por los derechos de imagen que, sobre todo, compran teles y medios de comunicación”, señaló. Amante del riesgo y de los retos, asume lo que considera “todo un honor para poder seguir representando a mi Isla”.
Tras los Juegos, de vuelta a Fuerteventura, se planteará su futuro profesional en un deporte que si bien le reporta muchos triunfos, también numerosos quebraderos de cabeza. Es difícil volver a pensar en campeonatos y competiciones con poco o casi nulo apoyo económico. "Hasta ahora, el único apoyo económico que he tenido en la Isla ha venido por parte del Ayuntamiento de Pájara, sin el que no habría podido competir todos estos años”, admite.
“Me gustaría poder centrarme en la competición sin tener que estar buscando dinero para poder competir”, reconoce.
Para ello, es preciso un cambio de mentalidad, subraya. “Los políticos entienden que es más valioso darle el dinero a una persona de fuera para que nos promocione que darlo a la gente de aquí, que viajamos por todo el mundo, que competimos con buenos resultados y que podemos ser buenos embajadores”.
Es importante que entiendan “que tenemos el poder de llegarle a la gente y que gracias a las redes sociales, podemos llegar”, concluye. Razón por la que la Federación Española de Vela no ha dudado en contar con ella.
Para seguir de cerca las actividades de la Federación Internacional de Vela en los Juegos Olímpicos de París, pueden consultar: World Sailing