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Pepe Sansó: "La Central de El Charco no cambiará de ubicación, es imposible"
Fuerteventura y el territorio, es el título de la mesa que ha promovido el programa La voz de Fuerteventura en Radio Insular, para analizar distintas cuestiones de actualidad, relacionadas con el territorio.
La Central de El Charco ha centrado buena parte del debate a escasas horas de que el MITECO abra los sobres del procedimiento concursal para reforzar el abastecimiento de energía, también en las Islas.
Todo apunta a que, una vez conocidas las propuestas, Endesa Unelco podrá sustituir los equipos obsoletos por otros más innovadores.
Una noticia que los integrantes de la mesa consideran pésima. Desde Eco Fem, Adelina Padrón, desde Fuerteventura tiene un Límite, Lola González, Edu Vidarte de SOS Malpey ,y Pepe Sansó, de Salto a la Transición Ecológica, han insistido en el grave problema de salud pública de estas instalaciones, las segundas más contaminantes del archipiélago. Emiten una media de 723 kilogramos de CO2 por megavatio hora y se encuentran en pleno casco urbano de la capital.
Pepe Sansó fue el más crítico al asegurar que la única vía posible es desmantelar la central, no trasladarla la ubicación.
A su juicio, la alternativa ofrecida desde el Ayuntamiento de Puerto del Rosario y respaldada por el Cabildo de Fuerteventura para reubicar los equipos en la zona cercana a Zurita no resulta viable porque, dijo, “no tiene fundamento”.
En esta línea, abogó por las tesis del Instituto Tecnológico de Canarias dirigidas a la idea de que hay que implantar rápidamente energía alternativa para, poco a poco, ir desmantelando las instalaciones, no cabe otra opción, reiteró. "La central de El Charco no cambiará de ubicación, es imposible”.
A futuro, según el ITC, que a su juicio ha impulsado “la mejor planificación de todo el Estado”, Fuerteventura debe acelerar los procesos para llegar a generar 1.459 megavatios en el horizonte de 2040 y contribuir a la descarbonización del sistema eléctrico del archipiélago. También insistió en la necesidad de la interconexión entre Islas y en la apuesta por la central hidroeléctrica de Chira Soria.
Unas tesis que encontraron el rechazo contundente del resto de colectivos representados en la mesa de debate que, recordaron, el pico máximo de demanda en Fuerteventura se dio en 2023 alcanzando 116 megavatios.
Los colectivos abogan por “sacar” la central cuanto antes de donde está y, destacaron que “ya desde 1961 existe un reglamento que insta a sacar estas industrias tan contaminantes de la ciudad", apuntó Eduardo Vidarte.
"Nademos en mierda"
En esta línea, mostraron su temor por que se autorice a Endesa a sustituir viejos grupos por unos nuevos “que querrán rentabilizar” dificultando las opciones de traslado a otro emplazamiento.
En este contexto, Pepe Sansó instó a acelerar el procedimiento de instalación de renovables en Fuerteventura “que va a paso de tortuga” mientras que desde Eco Fem y Fuerteventura tiene un límite, se aboga por incrementar la participación ciudadana en la toma de decisiones y tiempo para decidir las mejores opciones, explicó González.
Además, también señalaron la necesidad de contemplar el decrecimiento de la demanda de energía, comenzando por la sensibilización y concienciación colectiva, también en los centros escolares.
En esta línea, llamaron a la movilización convocada el próximo 20 de octubre en Corralejo, que se replicará en el resto del archipiélago y en ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia, para exigir un cambio en el modelo turístico, muy relacionado con el consumo de energía y de agua, recalcaron.
“Nadamos en mierda”, alertaba Adelina Padrón poniendo el foco en los numerosos emisarios habilitados en Fuerteventura que vierten directamente en el mar, pidiendo reducir el impacto negativo del turismo en el territorio y una mejor redistribución de la riqueza que genera la industria en el archipiélago.