El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Sergio Lloret (AMF), hizo valer su voto de calidad para sacar adelante la propuesta de declaración de interés insular del proyecto Dreamland y lo hizo con el apoyo del consejero de Nueva Canarias y toda la oposición.
Ni Coalición Canaria ni el Partido Popular apoyaron la propuesta. Algo que no gustó al presidente que, a la salida de la sesión y ante los medios de comunicación, aseveró: "estas cuestiones no son las normales y lógicas de un grupo de gobierno, pues dar tumbos flaco favor le hace a la población de la Isla”.
En esta línea, insistió, "en política puede pasar de todo" aludiendo a posibles ceses a sus socios de gobierno y, añadió, “tampoco tengo ningún miedo a tomar las decisiones que sean correspondientes si se ve que es imposible continuar adelante”.
El presidente se mostró muy crítico con la postura de nacionalistas y populares, y defendió su voto favorable al proyecto: "Me gusta ser responsable con las decisiones y dar posibilidad a que Fuerteventura opine”.