En una entrevista en el programa La Voz de Fuerteventura, en Radio Insular, la presidenta de FIMAPA ha puesto en evidencia las carencias del sistema educativo en Fuerteventura.
Grimanesa González fue especialmente crítica con la saturación de las aulas enclave en la isla, que “en algunos casos superan los seis o siete alumnos”, desveló. En esta línea, abogó por “una mayor inclusión en las aulas. Hay niños en aulas enclave que podrían estar en clases ordinarias si contaran con el apoyo de un auxiliar”.
La presidenta fue también muy dura con respecto a la labor realizada por la adjudicataria del servicio, Aeromédica, “cuyo contrato está caducado”. Según explicó, “tienen personal no cualificado y, además, el personal que tienen no cobra un sueldo digno”.
Además, prosiguió, la empresa dificulta la comunicación entre auxiliares y el centro educativo. “Un director no puede dar órdenes directas a un auxiliar. Tiene que llamar a la empresa para que esta gestione las instrucciones. Esto no tiene sentido”, denunció.
Prioridad, los NEAE
De cara a 2025, FIMAPA ha decidido priorizar la situación de los alumnos con Necesidades Específicas de Apoyo Educativo (NEAE).
En esta línea, lamentó que en toda la isla de Fuerteventura solo existe un centro de educación especial en el norte, obligando a las familias del sur a recorrer largas distancias para acceder a recursos como los servicios de logopedia.
“Las listas de espera son abrumadoras y las familias se sienten abandonadas por el sistema. No podemos retroceder, debemos avanzar hacia una inclusión real”, afirmó.
Asimismo, González también subrayó la necesidad de modernizar el reglamento NEAE, tomando como referencia modelos exitosos como el de Ibiza, donde se logran mayores niveles de inclusión en las aulas ordinarias. De hecho, en el Encuentro de Ampas de Canarias, celebrado recientemente en Lanzarote, demostraron ser un ejemplo a seguir en inclusión educativa, afirmó.
Transporte y comedores…siguen las quejas de las familias
Grimanesa González también señaló deficiencias en el transporte escolar y en el servicio de comedores. “Nos siguen llegando quejas de las AMPA sobre las condiciones del transporte. Hemos visto casos de niños sentados en los pasillos de las guaguas”, explicó.
En cuanto al personal, González destacó que no solo faltan profesionales, sino que muchas personas, demandantes de empleo, rechazan las ofertas de trabajo. “Tenemos un problema y tenemos que resolverlo. No hay personal cualificado y la gente que hay no quiere aceptar las condiciones actuales”, añadió.
Aun con todo, el balance “no es negativo tampoco del todo”, reconoció, pero sí es verdad que preocupa, sobre todo, la falta de personal. “Nuestra realidad es la que es: distancias, falta de personal e infraestructuras insuficientes. Somos los que somos, pero debemos aunar esfuerzos para solventar estos problemas”, concluyó.