Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC) defendió, ante el pleno del Parlamento, la creación de la agencia canaria de emergencias, respaldada por todos los grupos salvo la extrema derecha.

La portavoz parlamentaria en la materia de NC-BC, Esther González, subrayó la urgencia de modernizar y centralizar el sistema de emergencias del Archipiélago para enfrentar los desafíos actuales y futuros con eficacia, eficiencia y una visión preventiva.

En la presentación de la proposición no de ley en la sesión de ayer miércoles, Esther González abogó por “repensar” el modelo de coordinación y gestión de las emergencias existente en la actualidad ya que, como señaló la diputada canarista, la seguridad “erróneamente” ha sido tratada como un elemento secundario, útil en momentos específicos. Abogó por integrar la misma en una estrategia “transversal” del Gobierno por su importancia para la calidad de vida y la protección de la  ciudadanía.

Para Esther González, el plan de seguridad vigente desde 1997 “modélico y útil” ha quedado desactualizado, por lo que es imprescindible que se adapte a los cambios en la economía, los movimientos demográficos y los efectos del cambio climático. Fenómenos adversos como calimas, vientos huracanados, incendios, inundaciones, tormentas, mar gruesa; así como erupciones volcánicas como la de La Palma y pandemias mundiales como la del coronavirus, en opinión de NC-BC, exigen una respuesta más eficiente y un enfoque preventivo.

Enfatizó la necesidad de que las autoridades asuman su responsabilidad en la gestión de las emergencias, incluyendo las competencias del artículo 149 del Estatuto que aún no han sido asumidas, como el salvamento marítimo. González propuso estudiar la creación de un cuerpo de guardacostas canario,

Observó las relevantes deficiencias existentes, como la falta de bomberos profesionales en La Palma, La Gomera y El Hierro, la ausencia de planes de emergencia actualizados en todos los municipios y cabildos, así como la dispersión de los servicios entre las diversas administraciones que complican las labores de coordinación y la eficacia en la gestión de las crisis.

Esther González sostuvo que razones de “eficacia, eficiencia, economía” aconsejan que, ante una situación de emergencia, exista una única autoridad de carácter público que englobe los múltiples servicios. Un planteamiento que le llevó a pedir la confianza de la Cámara para instar al Gobierno canario a crear la agencia canaria de emergencias como un organismo público con personalidad jurídica propia.

Su misión, añadió, será la de prevenir y responder a situaciones de emergencia, tanto ordinarias como extraordinarias. Una autoridad única para toda la comunidad y centralizada en materia de seguridad y emergencias para garantizar una gestión eficaz, con personal capacitado y facultades para intervenir en actividades peligrosas.

Dependiente de la consejería competente en la materia del Gobierno de Canarias, contaría con un consejo rector compuesto por representantes del Ejecutivo, de los cabildos, de la Federación Canaria de Municipios (Fecam) y de las universidades públicas. Además, se crearían centros de coordinación en cada isla, alineados con el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad 1-1-2 de Canarias, para mejorar la gestión local.

Esther González hizo un llamamiento a reflexionar sobre los modelos de gestión de las emergencias tras la reciente catástrofe de la gota fría, la DANA en Valencia, al mismo tiempo que admitió las enmiendas de CC y el PP para tramitar una ley de Protección Civil en Canarias.