#CAMA2023 concluye con éxito con una suelta de pardelas y una visita al palmeral de la madre del Agua
El Cabildo de Fuerteventura, a través de la Consejería de Medio Ambiente, clausuró con éxito las Jornadas Medioambientales Cama-Conferencia Atlántica de Medio Ambiente. Una quincena de expertos medioambientales abordó los diferentes retos a los que se enfrenta el Archipiélago en materia de conservación de hábitats, con más de 25 horas de charlas y actividades.
El consejero de Medio Ambiente, Carlos Rodríguez, valora positivamente el resultado de presente edición, que ha reunido a expertos de diferentes ámbitos y dado a conocer los diferentes proyectos de futuro que se promueven desde Canarias para hacer frente a los principales retos medioambientales.
Las jornadas cerraron este fin de semana con una salida de campo al palmeral de del Barranco de la Madre del Agua, uno de los lugares de mayor valor natural del municipio de Pájara y de Fuerteventura. La visita a la Madre del Agua fue guiada por el edafólogo y profesor de biología, Juan Miguel Torres, el profesor de edafología y química agrícola de la Universidad de La Laguna, Francisco Díaz, y los técnicos de medio ambiente, Eduardo Franquiz y Marcos Díaz-Bertrana. Los presentes pudieron conocer de primera mano y poner en práctica los conceptos aprendidos durante las ponencias, que versaron sobre gestión del suelo, conservación de palmerales y otras especies vegetales de Fuerteventura.
Suelta de pardelas
Tras la visita a este enclave de gran valor natural, los asistentes participaron en una suelta de cinco pardelas, llevada a cabo por la Consejería de Medio Ambiente del Cabildo de Fuerteventura. Estos ejemplares fueron recuperados gracias a la colaboración ciudadana e institucional, dentro de la campaña de protección de la pardela cenicienta (Calonectris diomedea borealis) de 2023.
Carlos Rodríguez agradece la colaboración ciudadana “que es fundamental en esta campaña de protección de la pardela, que el año pasado permitió rescatar en torno 170 pardelas, que se liberan progresivamente durante los meses de septiembre, octubre y noviembre, los meses más críticos para la especie”.
La colaboración y coordinación de medidas entre administraciones, asociaciones, colectivos, centros turísticos y ciudadanía es imprescindible para la protección y conservación de la pardela, especialmente en esta época del año en la que salen de los nidos para dirigirse al mar.