Se restauran seis esqueletos de la Senda de los Cetáceos

Restauración Senda de los Cetáceos

 A través de la Consejería de Medio Ambiente, la corporación insular preserva y revitaliza la osamenta de seis animales marinos, ubicados en diversos puntos de la isla

El Cabildo de Fuerteventura, a través del área de Medio Ambiente, ha emprendido la restauración de los esqueletos que conforman la Senda de los Cetáceos. La iniciativa busca preservar y revitalizar este importante patrimonio natural marítimo, que representa una parte integral de la historia marina de la isla.

El consejero de Medio Ambiente, Carlos Rodríguez, destacó que esta iniciativa “no solo es un testimonio de la rica biodiversidad marina que ha rodeado a Fuerteventura, sino también una oportunidad para educar a la comunidad sobre la importancia de preservar nuestro entorno marino. La restauración de estos esqueletos no solo es un acto de conservación, sino también un homenaje a la magnificencia de estas criaturas marinas”.

Las osamentas se encuentran en puntos clave de Fuerteventura, cercanos a la costa donde originalmente vararon estos cetáceos. Los lugares de restauración incluyen El Cotillo, al lado de la Torre del Tostón; Gran Tarajal, en la rotonda, al lado de la cofradía de pescadores; Las Salinas del Carmen; Puerto Rosario, en la parte derecha de Playa Chica; en el área de descanso de la Isla de Lobos, y en el Saladar de Jandía, cerca del faro. Cabe destacar que este último esqueleto será desmontado debido a imperfecciones significativas que requieren una restauración completa.

El proceso de restauración abarca el mantenimiento y la reparación de los esqueletos de animales marinos, entre ellos dos zifios de Cuvier, un rorcual aliblanco, un calderón, un rorcual común y un cachalote. Estos restos óseos, expuestos a la erosión del viento, la arena y el agua salada, requieren atención especializada para garantizar su conservación a largo plazo.

Los trabajos de recuperación implican la reparación de fracturas en huesos rotos, modelado de partes faltantes y la aplicación de técnicas especializadas para proteger los esqueletos de los efectos dañinos del entorno marino. Se estima que cada esqueleto requerirá aproximadamente dos semanas para completar este proceso.

Con esta iniciativa, el Cabildo reafirma su compromiso con la preservación del patrimonio natural y continúa trabajando para asegurar que las futuras generaciones puedan disfrutar de la belleza única y la riqueza biológica que la Senda de los Cetáceos representa.