Los vecinos de La Pared vuelven al Juzgado para obligar al Ayuntamiento de Pájara a hacerse cargo de los servicios públicos
El 24 de octubre de 2014 se publicaba la sentencia que obligaba al Ayuntamiento de Pájara a hacerse cargo de los servicios públicos de su competencia en La Pared. Servicios como el alumbrado público, la limpieza viaria, el abastecimiento de agua potable, el alcantarillado así como la pavimentación de las vías públicas existentes en las distintas urbanizaciones.
A pesar del tiempo transcurrido, poco o nada se ha hecho al respecto desde entonces, según manifiestan los vecinos y vecinas de la zona que “hartos de la situación y sintiendo que nos están tomando el pelo”, vuelven a dirigir escrito al Juzgado para demostrar que la sentencia sigue sin ejecutar.
En el escrito se insta al secretario general del Ayuntamiento, Juan Manuel Juncal Garrido, y al edil de Urbanismo, Alexis Alonso Rodríguez, “a que dispongan lo necesario de cara a la efectiva prestación de estos servicios municipales”.
Para su cumplimiento, fijan el plazo máximo de un año, como explica la vecina Stella Mangino que traslada “el malestar por esta situación que llevamos aguantando desde hace más de ocho años desde que se pronunció la Justicia. Hay muchos que han tirado la toalla y se han marchado. Otros, desgraciadamente, ya han fallecido”, lamenta, en declaraciones a La Voz de Fuerteventura.
La gota que ha colmado el vaso es, explica, el escrito presentado por el propio Ayuntamiento para esgrimir como obstáculo para cumplir esta sentencia, una sentencia posterior, de 2018, que establecía en el plan parcial la ejecución forzosa por caducidad del expediente administrativo, “es decir, por errores imputables a la propia administración en la tramitación del documento”.
Esta sentencia fue anulada incluso por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias por lo que “no puede, en ningún caso, ser un obstáculo para el cumplimiento de la ejecución judicial”.
Cambio radical
El escrito del Ayuntamiento es reciente, insiste, de julio de 2022 “e implica un cambio radical en la postura que ha mantenido hasta ahora la corporación y, además, contiene graves contradicciones”, recalca.
Por un lado, “se reconoce que la urbanización no está terminada y que nunca se culminó, que no hay asfaltado, ni farolas ni aceras; pero, por otro lado, se afirma que la sentencia se ha cumplido en sus términos y que se están presentado los servicios mínimos. Si no hay farolas, difícilmente se puede prestar el servicio de alumbrado público. Si no hay asfaltado ni aceras no se está cumpliendo con la sentencia en sus estrictos términos. La realidad habla por sí sola”, argumentan los vecinos en la denuncia.
Además, de repente, en julio de 2022, prosiguen, la corporación contradice todo lo manifestado a este Juzgado y afirma que dichos proyectos no tienen relación con la ejecución de la sentencia.
Los vecinos, insiste Mangino, “no alcanzamos a entender el radical cambio de criterio, desconociendo si el Ayuntamiento ha faltado a la verdad en varias ocasiones a este Juzgado”.
En esta línea, critican que, de forma “totalmente torticera”, la corporación alega estar trabajando en el cumplimiento de la sentencia con proyectos de mejora del servicio y no para la prestación del mismo”.
Sin servicios pero con esculturas
El enfado es mayúsculo y no olvidan que, tras la sentencia, “lo primero que hizo el Ayuntamiento fue colocar 4 esculturas, pagadas con dinero público, de las que una (el pulpo) esté desaparecida después de haber sido retirada por el Ayuntamiento”. Es un ejemplo, insisten, “de las prioridades del gobierno”.
Por todo ello, consideran que debe haber una apuesta firme de la corporación “por cumplir con la ley y dar respuesta a los vecinos que a diario se enfrentan a muchos problemas por las carencias en los servicios que debería estar prestando, al igual que en otras zonas del municipio, el Ayuntamiento”.