Óscar Hernández: “Estamos ante el peor presupuesto en materia sanitaria desde que existe Salud y Sonrisas”
El presidente de Salud y Sonrisas, Óscar Hernández, y Eduardo Blasco Olaetxea, analizan en el programa La Voz de Fuerteventura el impacto del borrador de presupuestos de 2025 en materia sanitaria en la Isla y urgen a habilitar y mejorar las infraestructuras en el sur.
Óscar Hernández y Eduardo Blasco Olaetxea fueron muy críticos con el borrador de presupuestos del Ejecutivo de Canarias para 2025, en el programa La Voz de Fuerteventura, en Radio Insular. Denunciaron que el Gobierno de Canarias “borra” partidas fundamentales para la sanidad de la isla recalcando que las cuentas no solo perpetúan el abandono de Fuerteventura, sino que eliminan de un plumazo proyectos clave, entre ellos, la creación del Centro de Atención Especializada (CAE) en el sur y la ampliación del Centro de Salud de Gran Tarajal.
Hernández subrayó que el presupuesto previsto para el CAE de La Lajita, que en 2024 era de 590.000 euros, ha sido reducido drásticamente a solo 100.000 euros en 2025, una cantidad que, según el presidente, “no alcanza ni para el proyecto”.
Este recorte afecta a una infraestructura vital que ya cuenta con el suelo cedido, pero cuya ejecución se vuelve inviable con este presupuesto. “Esto no es una inversión, es un borrado del proyecto”, recalcó poniendo de relieve que la isla sufre grandes desigualdades en materia sanitaria.
Por su parte, Blasco denunció la desaparición de la partida destinada a la ampliación del Centro de Salud de Gran Tarajal; otro proyecto, que consideró, fundamental, para la atención sanitaria en el sur de la isla. “
Este centro es la columna vertebral de la atención primaria en la zona y necesita con urgencia mayor capacidad para atender a una población en constante crecimiento” explicó Blasco.
El expediente de ampliación del centro lleva desde agosto en poder del gobierno, recalcó, pero ahora se enfrenta a una financiación de “cero euros”. Una muestra más, dijeron, del “abandono” de la Isla.
También ha quedado fuera, en el borrador que ha iniciado su tramitación en el Parlamento de Canarias, la inversión para el consultorio de El Cotillo, a pesar de contar también con el suelo cedido por el Ayuntamiento para su proyección.
No hay partida tampoco ni para el Centro de Salud de El Matorral ni para el de El Castillo. En este punto, desde la asociación instan a optar por el segundo y desechan la idea de dos infraestructuras sanitarias tan cercanas y que, en el caso de El Matorral, cuenta con el Hospital y con varios centros de salud a pocos minutos.
Para la asociación, la propuesta de El Matorral “fue una petición más que otra cosa política que al final se ha enquistado para las pasadas elecciones” y el Centro de El Castillo, una demanda histórica.
Desde Salud y Sonrisas se considera que el avance en materia sanitaria en Fuerteventura apenas es perceptible porque se viene arrastrando un déficit desde hace muchos años. A pesar de que, la lucha de la ciudadanía, ha permitido la habilitación de la Unidad de Hemodinámica o el búnker de radioterapia, “para nosotros estamos todavía muy atrás, porque venimos de un retraso brutal y se va acumulando. Se logran cosas, que tendrían que haber estado ya hace quince años”.
Desde la entidad, se considera que con el retraso en las inversiones necesarias y partiendo de una situación de abandono, “pues vamos a estar cada vez peor”.
También aseguraron que han hecho un listado de necesidades sociosanitarias de la isla “y no hay manera de que hagan una inversión”.
“Hemos pasado, de años de corta y pega, al te borro en los presupuestos”, lamentó.
Tanto Hernández como Blasco manifestaron su preocupación por el trasvase de dinero público a la sanidad privada. En el caso de Fuerteventura, son “chiringuitos” montados, sobre todo, para sacar dinero a los turistas.
Salud y Sonrisas inició ayer miércoles una ronda de contactos con los parlamentarios majoreros para trasladar sus impresiones de cara a mejorar el borrador de las cuentas y lograr la inclusión de estas infraestructuras en los presupuestos.
“Estamos hablando de la salud de miles de personas”, puntualizó Hernández. “Es una cuestión de dignidad y de justicia social”, zanjaron, instando a la ciudadanía, a ser más crítica.