El Cabildo respalda también la pesca deportiva e insta a abrir un nuevo trámite de información pública y alegaciones
El Cabildo de Fuerteventura, en consejo de Gobierno celebrado hoy, lunes, 17 de mayo, acordó mostrar su apoyo tanto a la pesca tradicional como a la deportiva, teniendo en cuenta que las dos son necesarias para el óptimo desarrollo económico regional e insular. Con respecto a la primera, hay que atender ‘a la realidad de Canarias y a la trascendencia que a nivel regional, y particularmente a nivel insular, tiene y ha tenido históricamente la pesca tradicional como medio de subsistencia familiar’. En cuanto a la segunda, es consciente la Institución del auge que ha experimentado y la importancia que ha adquirido dentro del llamado turismo deportivo.
Por todo ello, el Cabildo manifiesta su ánimo de colaborar con las distintas administraciones para llegar a una regulación que satisfaga los intereses de ambos sectores. ‘Tenemos que esforzarnos para lograr algo que históricamente ha sido difícil, como es la convivencia pacífica de ambas modalidades pesqueras’, explica el presidente, Sergio Lloret López. Para ello, el Consejo de Gobierno acordó solicitar una reunión conjunta entre administraciones estatal, autonómica e insular y representantes de ambos sectores de pesca en la voluntad de recoger los intereses de ambos y llegar a los deseados consensos.
Asimismo, y dado el efecto que la nueva normativa tendrá en la economía insular, el Cabildo propone que se abra un nuevo trámite de información pública y alegaciones, para que todos los colectivos afectados puedan presentar una propuesta regulación estudiada. ‘Siempre es mejor legislar desde los consensos. Y llegar a ellos es posible cuando se favorece la máxima participación de todas las partes implicadas’, concluye Lloret.
Una amplia representación de pescadores y aficionados a la pesca deportiva se concentró la pasada semana para manifestar su oposición al borrador de Real Decreto que prepara el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. El texto impide la pesca desde kayak, prohíbe la captura de hasta 46 especies y zonifica la pesca submarina, además de incrementar los trámites burocráticos para practicar la actividad.