El Museo Arqueológico de Fuerteventura presenta una cerámica única descubierta por el joven Juan José Hernández

Ante el hallazgo casual de este tipo de materiales es importante dar aviso a las autoridades competentes

El Museo Arqueológico de Fuerteventura presentó este martes, día 13 de diciembre, una cerámica de excepcional valor arqueológico que fue descubierta de forma casual en un malpaís de la Isla y que pasa a formar parte de los fondos del museo. La pieza fue hallada casualmente por un niño y su importancia obedece al valor del yacimiento, que se encuentra relacionado con lugares de carácter religioso del pueblo maho, siendo este un espacio con potencial arqueológico de verdadero interés. Destaca además la excepcionalidad de la cerámica, tanto por su decoración como por su tipología, ya que no existen registros parecidos en el Museo Arqueológico de Fuerteventura, ni tampoco en el Museo Canario o el Museo Arqueológico de Tenerife.

Otro de los aspectos de interés es la profusión decorativa de la vasija, que ocupa absolutamente todas sus partes excepto la base, lo que indica que trata de una cerámica especial, pues la mayoría de las piezas conservadas solo presentan decoración en su tercio superior.

La directora general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias, Nona Perera, el consejero de Cultura del Cabildo, Rayco León, y el director del Museo Arqueológico, Luis Mata, hicieron entrega de un obsequio al descubridor del hallazgo, Juan José Hernández (de doce años de edad); recordando la necesidad de dar aviso a las autoridades ante hallazgos casuales de este tipo de materiales.

Para una mayor durabilidad y su conservación, el Museo Arqueológico de Fuerteventura realizará el estudio pertinente de la pieza, realizando primero un raspado de su interior para analizar el posible contenido que pudiera tener y conocer su posible funcionalidad. Posteriormente, se procederá a su consolidación para su conservación final y almacenamiento en el Museo Arqueológico de Fuerteventura. 

La cerámica estaba escondida en el interior de una grieta, sin apreciarse contenido en el interior de la misma. Con una altura de 7 centímetros, 15,5 centímetros de longitud y 12 centímetros de ancho, presenta un estado de conservación regular, con varias grietas longitudinales en su fondo y cierta erosión en sus paredes exteriores. De fondo plano y forma ovalada, destaca por su abundante decoración, presentando en su parte superior dos filas de pequeñas protuberancias que rodean totalmente el cuerpo de la vasija. Presentan además surcos verticales hasta la base de la cerámica, elemento muy característico de la decoración del pueblo maho. La pieza es de color negro en muchas partes de su exterior y anaranjado en el interior, siendo necesario realizar un mayor análisis para comprobar si las partes negras corresponden al propio proceso de reducción de la cerámica durante su cocción, o si la causa es su uso doméstico y reiterado contacto con el fuego.

Durante el acto, la directora general de Patrimonio Cultural presentó además el tríptico ‘El Pueblo Majo. El legado de un pasado’, un folleto divulgativo que se repartirá por toda la Isla y cuyo objetivo es dar a conocer la importancia de los materiales arqueológicos de la cultura de los mahos y explicar qué se debe hacer frente a los hallazgos casuales.

“El tríptico, elaborado por Rosa López, arqueóloga que centra sus investigaciones en el pasado aborigen de esta isla, se edita con el propósito de invitar a conocer ciertos aspectos generales de la población aborigen a las personas que visitan el Museo Arqueológico de Fuerteventura”, adelantó Perera. Este centro museístico es ya una “sólida estructura educativa y de difusión para materializar su ineludible vocación de servicio”, reconoce, “trabajar al servicio de la población y de su desarrollo” es una labor continua dentro de las funciones de los museos y en este caso se cumplen con éxito.

Por su parte, el consejero insular, Rayco León, explicó que el folleto se dirige a garantizar la conservación y protección por parte de la ciudadanía del Patrimonio de Fuerteventura.

Ante el hallazgo de materiales, no se deben sustraer, ya que el lugar y la posición de los objetos puede ser relevante para su estudio por parte de personas especializadas. Es recomendable, asimismo, tomar ubicación GPS y fotografía de la pieza.  Es preciso dar aviso a los servicios que intervienen en la protección del patrimonio cultural, como la unidad de Patrimonio Cultural del Cabildo, a través del teléfono (928 862 451 o patrimonio@cabildofuer.es), agentes de Medio Ambiente, el Servicio de Protección de la Naturaleza o el Museo Arqueológico de Fuerteventura (928 171 414).

Se recuerda, además, que no comunicar la localización, sustraer o alterar cualquier tipo de material arqueológico puede ser un delito previsto en el código penal o infracción administrativa, con multas que oscilan entre los 3.000 y los 6.000 euros.