El testamento vital es un acto de amor y responsabilidad
El trabajador social y responsable del registro de Manifestaciones Anticipadas de Voluntad, más conocido como testamento vital, Sixto Ramírez invita a pensar en cómo queremos que sean nuestros últimos días y qué tipo de cuidados queremos recibir cuando ya no tengamos la capacidad de decidir sobre nosotros mismos. Decisiones que debería tomar la población, con independencia de la edad, y que se plasman por escrito en un documento legal, reconocido por la Consejería de Sanidad ya que es una prestación del Sistema Nacional de Salud. El objetivo, explica, es asegurar que los deseos del paciente se respeten hasta el final.
En Fuerteventura, Sixto atiende a una media de 8 o 10 personas cada lunes en el Centro de Salud Puerto 2, para explicarles, paso a paso, qué significa cada una de las numerosas preguntas que contiene el cuestionario. Su presencia da aliento, apoyo y seguridad a quienes dan el paso. “El proceso de elaboración del documento ha sido muy meticuloso y ha pasado por diversos comités de ética de todos los hospitales del archipiélago canario”, insiste.
Las preguntas abordan cuestiones como si una persona desea prolongar su vida a toda costa o prefiere evitar el dolor y la angustia; los cuidados paliativos. También si quiere recibir sedación paliativa para garantizar una muerte tranquila y sin dolor.
Son decisiones que sin la existencia del testamento vital, recaerán en los familiares del paciente que deberán decidir en un momento de fuerte carga emocional, apunta Ramírez.
El trabajador social toma las palabras de Carolina Perera, referente en Canarias en este tema, y destaca que completar un testamento vital es un acto de amor hacia los seres queridos, y, también de responsabilidad.
En Fuerteventura, en lo que va de año, se han registrado 106 manifestaciones anticipadas de voluntad. La mayoría las han presentado mujeres, más familiarizadas con el cuidado. “Cuando vienen, nos cuentan que quieren hacer el testamento vital porque no quieren morir de ésta u otra forma; son más conscientes de la importancia de estas decisiones”, recalca.
La experiencia de quienes completan el documento es, en general, liberadora. La mayoría expresa un gran alivio y tranquilidad al saber que sus deseos serán respetados y que han evitado una carga emocional adicional a sus familiares.
Por eso, invita a la ciudadanía a informarse y a considerar la realización de este documento. Solo es necesario marcar el 012, pedir cita y dejarse acompañar por Sixto Ramírez.